Verdaderas historias de amor y dedicación a los otros colmaron la clausura del I Congreso Cubano de Payasos Terapéuticos, Arte y salud 2018, que sesionó recientemente en el Cardiocentro Pediátrico William Soler, con la participación de más de 100 profesionales dedicados a esta labor.
Tras tres jornadas de intercambio, aprendizaje y superación artística, las experiencias de artistas de Cuba y países como México, Colombia, Brasil y Canadá corroboraron el beneficio de este tipo de terapia como parte de la atención integral al paciente en las instituciones de salud.
Concordaron que el paciente es lo principal, a ellos se deben y respetar su espacio es fundamental en este trabajo. También destacaron la importancia de la improvisación y utilización de los recursos artísticos aprendidos para no romper jamás esa relación de confianza y complicidad que establecen con las personas.
En la última jornada, 90 payasos participantes en el evento realizaron el pase de Risita por diferentes salas de la citada institución cubana de salud. En la práctica, conocimos cómo el juego, el arte, la risa, talento y voluntad desarman a la enfermedad para sembrar esperanzas.
Entre las conferencias expuestas en este Congreso estuvieron: “Familia, vulnerabilidad y resilencia”, “Risoterapia para parejas”, “Ampliando los límites: payasos más allá del hospital” y “Acercamiento a una propuesta de formación técnico – profesional del payaso terapéutico en Cuba”.
También se desarrollaron 12 talleres de superación artística sobre relación payasos y bebé, cómo conectar con los ancianos, el uso de la nariz roja como máscara humana en el hospital, técnicas psicoterapéutica en pacientes con enfermedades crónicas y el autocuidado del clown en salud.
Se recordó, además, a los profesionales de la salud, artistas y amigos de los que germinó esta idea que sigue floreciendo. Hoy el país cuenta con un Grupo de Payasos Terapéuticos con presencia en 11 de las 15 provincias y experiencias positivas que avalan la necesidad de su trabajo en las instituciones de salud.
Desde hace 20 años, los payasos han contribuido a las terapias y cuidados de niños con enfermedades crónicas en salas de hospitales pediátricos. Fue en 2013 cuando que se puso en marcha el proyecto de formación para el sector sanitario, acompañado desde el Ministerio de Salud Pública.
Actualmente los payasos terapéuticos llevan entretenimiento hasta institutos nacionales, hospitales generales y pediátricos, psiquiátricos, salas de rehabilitación, centros psicopedagógicos y hogares de ancianos.
Lic. Yeni Ortega Betancourt. Centro Virtual de Convenciones de Salud-Cencomed.