Dr. Jesús Antonio Juan Rodríguez
Nació en Santiago de Cuba el 30 de diciembre de 1951. Se graduó en la Universidad de Oriente de doctor en medicina en 1975 con excelentes resultados, premios y reconocimientos entre ellos el Premio del I Fórum Nacional Científico Estudiantil por la investigación “Citoquímica de la adenohipófisis durante la ontogénesis” y la Orden Nacional FEU-Cuba del deporte y la investigación en 1974.
Especialista de Primer Grado en Pediatría en 1981, de Segundo Grado en 1988 y en 1992 de Segundo Grado en Genética Clínica, fue el primer pediatra del país en obtener ese título y el primero en Cuba en lograr esa doble certificación en la especialidad de Genética Clínica.
Durante su desempeño laboral ocupó múltiples responsabilidades, fue director municipal de salud, vicedirector y jefe de servicio de neonatología de hospital pediátrico, y como jefe del servicio de Clínica de la Nutrición además de presidente del Comité de Prevención y Control de la Infección Hospitalaria en Santiago de Cuba.
En Pinar del Río laboró desde 1984, ocupó cargos como vice director del hospital pediátrico provincial docente "Pepe Portilla", director del policlínico de Especialidades Pediátricas, director del Centro Provincial de Genética Médica (1989-1994) además de fundador, y jefe del servicio de Clínica Pediátrica del hospital provincial y del Centro Provincial de Retinosis Pigmentaria. Ocupó la jefatura del Grupo Provincial de Genética Clínica y del programa de Tecnología Avanzada entre 1986 a 1995.
Su actividad política y sindical estuvo marcada por diferentes responsabilidades, fue secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas y Presidente de las Brigadas Técnicas Juveniles, obtuvo en tres ocasiones el Sello Forjadores del Futuro y fue Delegado a la IV Conferencia Nacional de las Brigadas Técnicas Juveniles en su provincia natal. En Vueltabajo, fue secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Ciencia por su hospital y delegado al I Congreso del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Salud donde resultó electo miembro del Comité Nacional y Vanguardia Nacional en tres ocasiones. En 1980 ingresó en el Partido Comunista de Cuba.
En el perfil docente una amplia hoja de servicios destaca su condición de Profesor e Investigador Auxiliar con más de 25 cursos de posgrado, muchos de ellos como profesor principal, más de un centenar de trabajos científicos presentados en eventos nacionales e internacionales, algunos en otros países; tutor y asesor de 37 tesis para especialidad en Pediatría, Neonatología y Genética Clínica y 35 publicaciones en revistas certificadas cubanas y del exterior. Cursó estudios de posgrado en Genética Humana en México, lugar al que regresó varias veces en funciones académicas participando por Cuba en eventos internacionales de la especialidad. Como Profesor Invitado impartió cursos en la Universidad de Guadalajara y en el Centro de Investigaciones Biomédicas de Occidente de México.
Fundó en 1980 el primer colectivo de profesores en la asignatura Genética Médica en Santiago de Cuba y luego en 1985 en la provincia pinareña donde hizo aportes a la caracterización de las causas genéticas de la ceguera, sordera y retraso mental en pacientes pediátricos aportando el primer estudio sobre la epidemiología mutacional en defectos congénitos en recién nacidos y de la retinosis pigmentaria en la región pinareña.
Su área de investigación fue fundamentalmente la Clínica Pediátrica, en estudios de defectos genéticos en recién nacidos y las enfermedades genéticas en la provincia. Colaboró con el Profesor Orfilio Peláez Molina en el estudio de la genética de la retinosis pigmentaria de Pinar del Río y del país, con los que obtuvo Mención al Mejor Trabajo Científico del Minsap en 1993 por la investigación del estudio epidemiológico de la retinosis pigmentaria en la provincia. Participó en el taller internacional sobre atención integral a las enfermedades de la infancia en Maputo donde expuso la experiencia cubana.
Cumplió misión internacionalista en Nicaragua en 1981 y una segunda en 1988 en Mozambique, siempre en actividades asistenciales y docentes. En su última colaboración internacional, en Maputo fue víctima de un acto vandálico que le produjo un grave politrauma espinal que le dejaría, como secuela permanente, una seria incapacidad motora. Integró la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana.
Miembro Titular de la Sociedad Cubana de Pediatría y presidente del Capítulo Pinar del Río durante dos períodos, miembro de la Sociedad Cubana de Retinosis Pigmentaria, miembro de la Americam Association for Clinical Chemestry y miembro regular de la Iberoamerican Society of Human Genetics of North America en 1996. Socio correspondiente del Colegio Jaliscence de Genética Humana de México. Fue miembro de la Comisión Provincial de Ética de las Investigaciones en Salud e integró el Consejo Provincial de Sociedades Científicas. Cumplió roles como árbitro de la Revista de Ciencias Médicas de Pinar del Río hasta su deceso.
Atesoró numerosos reconocimientos entre estos, la Medalla 55 Aniversario de la CTC, Educador Ejemplar de la Educación Superior, Profesional Destacado en la Docencia, sello 10 años de dirección por el Minsap, medalla “Manuel Fajardo”, y reconocimientos por la Dirección Nacional del programa de retinosis pigmentaria como fundador. En el 2004 integró el grupo que recibiera por primera vez la Medalla “Juan Tomás Roig” del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente. En el 2002 se le otorgó el título de Maestro Nacional de Ajedrez por la Federación Cubana de ese deporte, su pasatiempo preferido después de la lectura.
Su discapacidad motora, pero no intelectual, y sus principios cristianos, lo mantuvieron activo en asesorías docentes de las especialidades en que, como experto reconocido, especialistas, alumnos y residentes, encontraron valiosa ayuda para sus proyectos. Durante algunos años se mantuvo asistiendo al servicio de Cuidados Progresivos de su hospital pediátrico. En cada actividad transmitió sus conocimientos y compartió experiencias con colegas y discípulos a favor de la formación de profesionales y de la salud de la población infantil pinareña. Trabajaba en la confección de un atlas de Genética a partir de su amplia experiencia como propuesta de aspirante al doctorado en Ciencias Médicas.
Fue un ejemplo a resaltar y a promover en la sociedad para apoyar con atenciones que garanticen a profesionales con discapacidades pero aptos para otros desempeños que puedan continuar aportando su capacidad como valor y ejemplar dedicación al trabajo en beneficio de su calidad de vida y de la sociedad como un verdadero legado formador.
Fallece el 24 de diciembre de cáncer del colon. En su sepelio, ante las numerosas condecoraciones expuestas y la guardia de honor de sus compañeros de la Asociación de Combatientes rodeado de familiares y amigos fue reconocida su ejemplar trayectoria.
A sus familiares, el consuelo del merecido descanso eterno, a los que lo acompañamos en su dolorosa marcha y pudimos compartir las alegrías que reflejaba en su amplia sonrisa cuando era solicitado y podía ayudar a otros con su brillante capacidad intelectual, el compromiso de promover su recuerdo como un valor inextinguible para el médico en formación.
Colaboración: Dr. Joaquín H. Pérez Labrador
Fuente: Expediente para optar por el título de Doctor en Ciencias Médicas.