El pasado viernes 6 de septiembre de 2019 falleció en esta capital el Profesor Doctor Pio Andrés Noriega Oliva, Especialista de I y II Grado en Oncología, Profesor e Investigador Auxiliar.
El profesor Pio Noriega inició sus estudios en la Escuela Púbica primaria No. 6, hasta que hizo su ingreso en el Instituto de Segunda Enseñanza de La Habana, donde se graduó de Bachiller en Ciencias en el año 1953, comenzando de inmediato sus estudios de medicina en la Escuela de Medicina de la Universidad de La Habana, donde se graduó en 1961.
Inició su etapa laboral como médico rural en mayo de 1962 y en julio de 1963 comenzó la residencia en Cirugía en el Hospital Universitario "General Calixto García Íñiguez".
Al graduarse de especialista en Cirugía General se le ubicó en el Hospital "Vladimir Ilich Lenin", en la ciudad de Holguín, en la antigua provincia de Oriente, donde ocupó las responsabilidades de Jefe de Departamento y Sub Director Técnico.
De regreso a La Habana en 1968 comenzó a laborar en el Instituto Nacional de Oncología y Radiobiología (INOR) donde, además de realizar tareas asistenciales, docentes e investigativas, se desempeñó como Jefe del Servicio de Tumores Periféricos, Subdirector Docente y Subdirector Técnico y participó en el Programa de Atención Médica Domiciliaria del INOR, desde 1974 hasta 1984.
Integró la Primera Misión Internacionalista Docente, realizada en Argelia en 1969, fue Jefe del Grupo Nacional de Oncología de 1974 a 1988 y militante del Partido Comunista de Cuba desde 1988. Era miembro de la Sociedad Cubana de Oncología.
El Profesor Pio Andrés Noriega Oliva se mantuvo asistiendo a las labores asistenciales y docentes hasta pocos días antes de su fallecimiento. La Oncología y la Medicina Cubana pierden a un profesional dedicado y comprometido, ejemplo para las futuras generaciones de médicos y oncólogos cubanos.
A sus familiares, y en especial a su esposa Tania, enfermera de nuestro instituto, las más sentidas condolencias del Consejo de Dirección, el PCC, la UJC, el sindicato y los Trabajadores de este centro de trabajo, que fue su otra casa.
Por: Dr. Alberto Céspedes Carrillo. INOR
Edición: MSc. Dra. Patricia Alonso Galbán