El Día Mundial de la Salud Bucal convida cada 20 de marzo a concientizar sobre la importancia de la salud bucodental e implementar una buena rutina de higiene, chequeos dentales regulares y estilos de vida saludables, para proteger la boca.
La celebración tiene como objetivo empoderar a las personas con los conocimientos, las herramientas y la confianza para garantizar una buena salud bucal.
Este año, el lema oficial de la campaña lanzada por la Federación Dental Internacional (FDI), y que se mantendrá para el periodo 2021-2023, es: "Siéntase orgulloso de su boca". En otras palabras, valórala y cuídala. La FDI quiere inspirar el cambio enfocándose en la importancia de la salud bucal para la salud en general, porque una buena salud bucal puede ayudar a vivir una vida más larga y saludable. Y eso es algo por lo que vale la pena actuar.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) las enfermedades bucodentales afectan a la mitad de la población, alrededor de tres mil 500 millones de personas. Los principales trastornos de salud bucodental son: caries dental, periodontopatías, cánceres bucales, manifestaciones bucodentales del VIH, traumatismos bucodentales, labio leporino y paladar hendido, y noma (una grave enfermedad gangrenosa que empieza en la boca y que afecta mayoritariamente a niños). La mayoría de los trastornos de salud bucodental son prevenibles en gran medida y pueden tratarse en sus etapas iniciales.
La carga de morbilidad por enfermedades bucodentales y otras enfermedades no transmisibles puede reducirse mediante intervenciones de salud pública dirigidas a los factores de riesgo más comunes.
Entre esas intervenciones cabe citar:
- – el fomento de una dieta equilibrada baja en azúcares libres y que incluya muchas frutas y hortalizas, y en la que la bebida principal sea el agua;
- – la interrupción del consumo de tabaco en todas sus formas;
- – la reducción del consumo de alcohol; y
- el fomento del uso de equipo de protección para la práctica de deportes y los desplazamientos en bicicletas y motocicletas (para reducir el riesgo de traumatismos faciales).
La exposición suficiente al flúor es un factor esencial en la prevención de la caries. Se puede obtener un nivel óptimo de flúor a través de diversas fuentes, entre ellas el agua potable, la sal, la leche y el dentífrico fluorados. Debería alentarse el cepillado con dentífrico fluorado (de 1000 a 1500 ppm) dos veces al día.
Este 20 de marzo, le invitamos a sumarse a la campaña mundial para actuar por la salud oral, con acciones individuales o colectivas. Recuerde: la higiene bucal, también es vida. La Biblioteca Virtual en Salud (BVS-Cuba) le propone revisar Oral Health: Supporting Adults Who Require Assistance. Second Edition, herramienta para guiar las mejores prácticas y la toma de decisiones en enfermería.
Más información:
– OMS. Salud bucodental.
– Siete mensajes sobre salud bucal para recordar.