La Nefrología como rama de la Medicina Interna alcanza el rango de especialidad a finales de la década del 50 e inicios de los 60 como expresión del desarrollo en ciencias básicas, fisiopatología, genética del ADN, tecnologías, trasplante de riñón, todo ello aplicado a la práctica médica en esos años.
En Cuba con el triunfo de la Revolución, fue la primera especialidad médica creada, en diciembre del 1966, luego de años de consagrado trabajo del Profesor Abelardo Buch López y su equipo en su sede actual, "alma mater" de la especialidad: el Instituto Nacional de Nefrología. Habían transcurrido solo seis años desde la constitución de la Sociedad Cubana de Nefrología (SCN).
Las transformaciones demográficas y epidemiológicas en el actual siglo XXI han condicionado un enorme aumento en la prevalencia e incidencia de las enfermedades no transmisibles (ENT). Entre ellas, la Enfermedad Renal Crónica (ERC) es reconocida como un problema global de salud pública, por la grave carga económica que impone a la sociedad para su desarrollo, al individuo y su familia.
La ERC es el resultado de otras múltiples enfermedades renales primarias o secundarias con factores de riesgo iniciadores y de progresión comunes a muchas ENT. Los estilos de vida inadecuados de hoy, son los factores de riesgo de mañana y estos serán a su vez, la causa de las ENT que ya son las principales causas de discapacidad y mortalidad en el mundo.
La enfermedad no puede ser vista por separado y el abordaje debe ser estratégico e integrado a otras ENT, con acciones integrales desde la prevención y la detección temprana, hasta el tratamiento dialítico y el trasplante con la vigilancia activa en todas las etapas.
Entre 10-12% de la población mundial (850 millones de personas en el mundo) padece de ERC y se estima viven en métodos de terapia renal de reemplazo, (TRR) por diálisis y trasplante más de 3 millones de personas. Se reconoce que actualmente es la sexta causa de muerte de más rápido crecimiento y la 11va causa de mortalidad mundial.
Son internacionalmente reconocidas las diferencias injustas y evitables en términos de accesibilidad, protección económica y cobertura universal con calidad en los servicios básicos, en la prevención, detección, tratamientos y métodos de diálisis y trasplante renal; o bien es inexistente la infraestructura, con los recursos mínimos necesarios y los profesionales especializados para ello.
Si estos servicios han de ser pagados por el paciente o la familia son inaccesibles por sus altos costos. Para los Estados representa una carga económica enorme que limita su propio desarrollo.
En el proceso salud-enfermedad, cada día se le concede más importancia a los determinantes sociales que no son más que las condiciones en que las personas viven y trabajan, que impactan sobre la salud (pobreza, bajo nivel educacional, condiciones de vida higiénico sanitarias inadecuadas en la comunidad, riesgos medio ambientales y laborales, discriminación de cualquier tipo) y que de aplicarse políticas publicas efectivas pueden ser modificadas y revertidas. Ello no se opone a la responsabilidad individual ante la propia salud, sino que demuestra que los esfuerzos en salud pública deben concentrarse en la esencia estructural de causalidad que las condiciona y ello es una responsabilidad del Estado.
Cuba es un ejemplo de lo que se puede alcanzar en un país sin grandes recursos de existir una voluntad política que permite ofrecer un cuadro de determinantes sociales con repercusiones para la salud totalmente diferente.
En estos 14 años, el Día Mundial del Riñón ha sido celebrado anualmente el segundo jueves de marzo, en Jornadas organizadas por la Sociedad Internacional de Nefrología y la Federación Internacional de Fundaciones Renales bajo el auspicio de la Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud. En este 2019, el lema central del Día Mundial del Riñón es "Salud renal para todos y en todas partes".
Tiene el objetivo de sensibilizar y concientizar acerca de la importancia de nuestros riñones y demostrar que es posible la prevención de las enfermedades renales, mediante la adopción de estilos de vida saludables, el control de los factores de riesgo que la provocan y que, en caso de presentarla, es tratable y se puede retrasar su evolución, evitar sus complicaciones o mantenerla bajo control, de efectuar con oportunidad y eficacia las medidas para su adecuada atención y manejo individualizado orientadas por los médicos.
En el año 2003 el Comandante en Jefe de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz, decidió priorizar la Especialidad de Nefrología y a partir de dicha indicación se crearon 15 nuevos servicios nefrológicos para "acercar los servicios a donde viven los pacientes", teniendo en cuenta que en este impulso ofrecido a la actividad nefrológica, con la decisión de colocarnos al más alto nivel en el ámbito de internacional, en lo científico técnico y de los recursos humanos, se debía partir de la premisa siguiente: "…lo más importante siempre será la prevención", como afirmó y orientó Fidel, adelantándose con su sensibilidad y visión al lema del actual 2019.
Los nefrólogos cubanos, al sumarnos como cada año a estas celebraciones y conscientes de los desafíos que representa la Enfermedad Renal Crónica (ERC) tenemos, desde julio de 2018, una clara "Estrategia de abordaje integral a la ERC", de salud renal, aprobada por el Consejo de Dirección del MINSAP, que perfecciona lo trabajado desde 1996 como expresión de la prioridad que tiene este problema de salud para nuestro Estado.
Como nunca antes, todas las dependencias del MINSAP se unen para la atención integral al paciente, en los ámbitos de promoción de salud, prevención, asistencial, de registro informatizado de pacientes, con indicadores trazadores de la actividad, de docencia, de investigación, de medios diagnósticos, aseguramiento y control estricto de lo orientado.
El universo de esta estrategia nacional, es toda la población cubana, el sujeto portador de factores de riesgo y el paciente. El objetivo es mejorar su calidad de vida, minimizar la carga humana y social por le ERC.
La capacitación de todos los médicos de "primer contacto", con todos los que aportan a los cuidados y atención de nuestros pacientes, en especial los especialistas en Medicina General Integral, permitirá trabajar coordinados, en equipos multidisciplinarios, mejorar los resultados asistenciales en métodos dialíticos y trasplante renal, la aptitud para el trasplante y reducir los costes sociales asociados a la enfermedad renal.
Orgullo y compromiso. Accionar coordinado, concentrado y coherente de los nefrólogos para cumplir nuestro compromiso con el pueblo y como homenaje permanente a Fidel.
Sociedad Cubana de Nefrología