El Día Mundial del Prematuro, que se celebra cada 17 de noviembre, es una oportunidad excepcional para concienciar sobre los desafíos y la carga que representan el nacimiento prematuro en todo el mundo. El día fue propuesto por la Fundación Europea para el Cuidado de los Recién Nacidos (EFCNI en inglés) y las organizaciones europeas de padres asociadas en el año 2008. Los cofundadores internacionales, LittleBigSouls (África), March of Dimes (EE. UU.) y National Premmie Foundation (Australia), se unieron a las celebraciones y convirtieron este Día en un movimiento intercontinental.
A la par, personas y organizaciones de más de 100 países unen fuerzas convocando a actividades y eventos especiales con el compromiso de llamar la atención acerca del parto prematuro y mejorar la situación de los bebés nacidos antes de tiempo y sus familias.
La tendedera de medias o calcetines con un par de color púrpura más pequeño y las luces del mismo color se han convertido en símbolos del Día Mundial del Prematuro en todo el planeta. El color púrpura en la identidad visual y significa sensibilidad y excepcionalidad.
2018 es un año especial porque se celebra el décimo aniversario de la fundación de esta fecha y el lema para la ocasión es: Trabajar juntos: asociados con las familias en el cuidado de recién nacidos pequeños y enfermos.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que cada año nacen unos 15 millones de niños prematuros (antes de que se cumplan las 37 semanas de gestación) y esa cifra está aumentando. Las complicaciones relacionadas con la prematuridad, principal causa de defunción en los niños menores de cinco años, provocaron en 2015 cerca de un millón de muertes. Tres cuartas partes de esas muertes podrían evitarse con intervenciones oportunas, eficaces y poco onerosas.
Si bien más del 60% de los nacimientos prematuros se producen en África y Asia meridional, se trata de un verdadero problema mundial. En los países de ingresos bajos, una media del 12% de los niños nace antes de tiempo, frente al 9% en los países de ingresos más altos. Dentro de un mismo país, las familias más pobres corren un mayor riesgo de parto prematuro.
Según recogió una entrevista realizada por el Periódico Granma al Dr.C. Fernando Domínguez Dieppa, especialista de II Grado en Pediatría y Neonatología y editor del sitio web Pediatría, «Internacionalmente se reporta entre un 8 y un 10 % de alteraciones severas del neurodesarrollo en los neonatos de muy bajo peso al nacer (menores de 1,5 kg). Para los padres de estos niños prematuros y los de otros recién nacidos de riesgo, los servicios de neurodesarrollo han resultado ser sitios donde ellos ocupan un importante lugar y pueden, al mismo tiempo, ir apaciguando la angustia que mantienen desde el nacimiento con respecto al futuro de sus hijos».