Desarrollar un estilo de vida saludable en el que fomentemos el ejercicio físico, una alimentación sana, la ingesta adecuada de sal y evitemos el consumo del tabaco y alcohol es determinante para reducir el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, primera causa de muerte en el mundo.
Esta fue la invitación que hacen los cardiólogos cubanos durante el acto central en Cuba por el Día Mundial del Corazón, que este año se enfoca en las acciones que podemos desarrollar como individuos para cuidar de nuestros corazones, los de nuestra familia, amigos y seres queridos.
El Dr. Reinaldo de la Noval García, especialistas del Instituto de Cardiología y Cirugía Cardiovascular, subrayó que en 2016 más de 17 millones de personas fallecieron en el mundo – principalmente en países de ingresos medios o bajos – por enfermedades relacionadas con el corazón, de ellos 7.4 millones por cardiopatía isquémica y 6.7 millones por accidente cerebrovascular.
En el caso de nuestro país, refirió que estas constituyen también la primera causa de muerte, 27 176 el pasado año, de acuerdo con el Anuario Estadístico de Salud. Señaló en ese sentido, el comportamiento de los factores de riesgo: diabetes mellitus, consumo de grasa animal, adición de sal a las comidas, hipertrigliceridemia, tabaquismo, ingestión de 3 % de frutas y vegetales, hipertensión arterial, insuficiente actividad física y consumo de alcohol.
Llamó la atención sobre la importancia de tener controlada la presión arterial, considerada como la más efectiva medida para obtener cambios sustanciales en la elevada mortalidad, y realizar una labor preventiva en la familia, incluso desde la niñez, a fin de crear conciencia sobre estas temáticas y cambiar formas erróneas de pensar.
El pasado año, la Organización Mundial de la Salud y la Federación Mundial del Corazón lanzaron la iniciativa 25×25, que propone reducir en 25 % la mortalidad prematura por enfermedades cardiovasculares para el año 2025.
En este contexto, se busca reducir en 10 % el consumo de alcohol e inactividad física, en 30 % la ingesta de sal y el uso del tabaco, en 25 % la hipertensión arterial y lograr 0 % de incremento de la diabetes y la obesidad.
Por su parte, el Dr. Eduardo Rivas Estany, presidente de la Sociedad Cubana de Cardiología, apuntó que desde su creación en el año 2000, Cuba ha acompañado la iniciativa del Día Mundial del Corazón.
Este año, refirió que se realizaron varias actividades en todo el país desde el día 24 de septiembre, entre ellas conferencias de diferentes temáticas y caminatas, como la realizada por las calles aledañas del Instituto de Cardiología y Cirugía Cardiovascular, acompañada por niños, abuelos, pacientes y familiares.
Recalcó la importancia de crear conciencia popular para prevenir los riesgos asociados a las enfermedades del corazón y subrayó que el gobierno cubano garantiza la atención a todas las personas con estos padecimientos.
El acto central por el Día Mundial del Corazón se efectuó el viernes 28 de septiembre en la sede de la Asociación Cubana de Naciones Unidas, con la participación de especialistas en cardiología, profesionales vinculados a esta rama de la medicina y pacientes.
Por: Yeni Ortega Betancourt. Centro Virtual de Convenciones de Salud.