Como parte de las actividades programadas por la celebración del aniversario 80 del Instituto de Medicina Tropical "Pedro Kourí", esa prestigiosa institución fue sede de un importante curso relacionado con las técnicas moleculares y su aplicación en diversas enfermedades.
Del 20 al 24 de marzo se realizó en el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí, IPK, el primer curso de Aplicación de Métodos Moleculares en el Diagnóstico, Genotipificación y Estudios de Epidemiología Molecular en Parasitología, que estuvo coordinado por los profesores y doctores en ciencias Ana Margarita Montalvo Álvarez y Jorge Fraga Nodarse.
Para conocer detalles del curso, en particular los relacionados con la aplicación de los métodos moleculares, asistí a una de las sesiones de trabajo en el departamento de parasitología del IPK y expliqué a la profesora Montalvo cuáles eran los propósitos de esta entrevista.
Aplicación de técnicas moleculares en el diagnóstico de enfermedades parasitarias
“Es oportuno referir que la aplicación de estas técnicas requiere de una infraestructura determinada y de materiales muy costosos, pero posibilitan el diagnóstico de muchas enfermedades, no solo parasitarias sino también virales, bacterianas y de otro tipo”.
“Comenzamos por implementar los diagnósticos moleculares en enfermedades exóticas, ya que tenemos que estar preparados para la entrada de personas en Cuba que puedan tener enfermedades desconocidas y necesitamos diagnósticos de certeza”
“Es el caso de los estudiantes que viajan a nuestro país para permanecer por largos períodos, de los visitantes que arriban por diversos motivos, de los colaboradores cubanos, etc. puede tratarse de leishmaniasis y trypanosomiasis, que son adquiridas en países tropicales y subtropicales”.
“A partir del desarrollo de proyectos que permitieron equipar convenientemente nuestros laboratorios se han realizado protocolos que responden a otros diagnósticos moleculares como en la toxoplasmosis y en la giardiasis”
“Son estudios que utilizan estas técnicas, no sólo para el diagnóstico, sino también en la tipificación de los parásitos que causan las enfermedades, lo cual se aplica, además, en la clínica, el pronóstico y el tratamiento de otras afecciones”.
“También se han empleado en el estudio de hospederos intermediarios de parásitos, por ejemplo, en la trasmisión de la fascioliasis”.
“Si se hace un estudio de los tipos de giardias y se logra la genotipificación, y, además, se obtiene una asociación con la sintomatología o la posible participación de animales de compañía en la trasmisión de la enfermedad, es posible disponer de conocimientos para influir en acciones asistenciales, de prevención, etc.”
La doctora Montalvo dijo que también se emplean estas técnicas para el diagnóstico de la toxoplasmosis en determinados grupos humanos, como es el caso de las personas inmunocomprometidas y las embarazadas. “Otros pacientes, con estas infecciones, puede realizarse el diagnóstico con herramientas serológicas y es lo que se hace internacionalmente”, aseguró.
Agregó que recientemente se inauguraron en Santiago de Cuba y en La Habana laboratorios de microbiología y biología molecular. “Este curso podría estimular a los investigadores que trabajan en esos centros a realizar estudios paralelos de otras afecciones de origen parasitario, y los resultados de esas indagaciones beneficiarían a la población cubana”.
“Soy optimista con el uso de las técnicas de biología molecular en Cuba; veo un futuro promisorio para estas herramientas y su correcta aplicación”.
Objetivos, participantes y otras consideraciones del curso
“El curso –indicó- estuvo dirigido a profesionales de distintas especialidades. Mostró los avances del IPK en las investigaciones parasitológicas que han empleado técnicas moleculares y a la vez estimuló a otros investigadores y al personal de asistencia en el estudio y la aplicación de estas técnicas en favor de la salud humana”.
“Participaron 20 profesionales, entre ellos, médicos de asistencia de algunos hospitales, integrantes de los centros provinciales de higiene y epidemiología, del laboratorio de microbiología y biología molecular recientemente inaugurado en Santiago de Cuba, integrantes de las Universidades de La Habana y de Camagüey y representantes de las provincias de Pinar del Río, La Habana, Camagüey y Santiago de Cuba. Además estuvieron presentes colegas de Panamá y México.”
Gran parte de los docentes procedió del IPK, con experiencia en el trabajo de parasitología, en particular de la biología molecular, además participaron jóvenes profesores con una extraordinaria preparación, que han realizado trabajos con un elevado nivel científico en nuestro departamento”.
“También contamos con la presencia de profesores extranjeros que fueron invitados por el impacto de sus investigaciones en este campo: la profesora Andrea Boggild, del Hospital General de Toronto, la profesora Lynn Soong, de la Universidad Médica de Texas, el profesor Braulio Valencia, de la Universidad Cayetano Heredia de Perú, y el profesor Francisco Morales, del Instituto de Medicina Tropical en Amberes, Bélgica”.