Una nueva encuesta de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) muestra que varios países de las Américas están aprovechando las tecnologías de la información y de la comunicación para la salud (la salud electrónica o eSalud), pero aún queda mucho por hacer para expandir su uso y alcanzar su máximo potencial.
“Durante los últimos años, la eSalud se ha desarrollado de forma intensa y su uso está modificando profundamente la atención en salud,” señaló Francisco Becerra, subdirector de la OPS/OMS. Sin embargo, indicó, “podemos aprovechar aún más el abanico de oportunidades que nos presentan estas tecnologías para cerrar brechas de atención, mejorar la salud y salvar vidas”.
El informe “La eSalud en la Región de las Américas: derribando las barreras a la implementación” reúne los resultados de la Tercera Encuesta Global de eSalud de la OMS realizada en las Américas, que contestaron 19 de 38 países de la región. Los temas consultados fueron ocho y van desde los registros electrónicos, la telesalud o la salud por dispositivos móviles (mSalud), hasta la capacitación del personal sanitario a través del aprendizaje virtual, los marcos legales para la eSalud, el uso de las redes sociales, y de los datos a gran escala (o Big Data).
El reporte examinó la situación de la eSalud y el papel vital que desempeña en la promoción de la cobertura sanitaria universal, una meta acordada por los Estados miembros de la OPS para que todas las personas tengan acceso a los servicios de salud que necesiten, con calidad, y sin riesgo de que esto les lleve a caer en la pobreza.