Actualmente viendo publicaciones en ¿Sabía que…?

Un enorme árbol genealógico para comprender la familia humana

Combinar miles de genomas modernos y antiguos para construir la mayor genealogía humana hasta la fecha es lo que ha logrado un equipo internacional de científicos.

El estudio, publicado en la revista Science, muestra los principales acontecimientos de la historia de la humanidad, así como su cronología y localización geográfica.

La secuenciación del genoma humano en las dos últimas décadas ha dado lugar a un conocimiento más profundo de nuestro pasado evolutivo. De esta forma, se han generado datos genómicos de cientos de miles de individuos, incluidos los de miles de personas prehistóricas.

Un equipo de científicos ha aplicado un nuevo método no paramétrico que combina datos de registro en árbol de genomas humanos antiguos y modernos, lo que les ha permitido deducir una genealogía completa humana.

“Un método no paramétrico significa que tuvimos que hacer muy pocas suposiciones sobre la naturaleza de las migraciones humanas. Por ejemplo, no necesitamos conjeturar si hubo una, o solo unas, pocas migraciones fuera de África, o que ocurrieron de una manera determinada, en un momento concreto.

Nuestro objetivo es dejar que los datos hablen por sí mismos”, dice Yan Wong, del Centro Li Ka Shing para la Información y el Descubrimiento de la Salud en la Universidad de Oxford (Reino Unido) y coautor del estudio que publica la revista Science.

Con esta técnica, el ancestro de dos individuos se asigna geográficamente al punto medio entre la localización geográfica de sus dos descendientes y se van determinando sus ancestros en el pasado. “Aunque sabemos que este método es imperfecto, parece recapitular bien muchos de los movimientos humanos conocidos. Quizás la sorpresa es, de hecho, que funciona razonablemente bien”, declara Aida Andres, del Instituto de Genética del University College de Londres y autora de un artículo en la misma revista, como comentario a este trabajo.

Hasta la fecha, se habían recogido miles de genomas humanos, que contienen segmentos de diferentes y múltiples ancestros de distintas edades. En consecuencia, la elaboración de una imagen completa de la genealogía y la variación genómica a lo largo de la historia humana representa un reto técnico.

Ahora, Wong y su equipo han logrado construir un enorme árbol genealógico para toda la humanidad. “Al tratar toda nuestra ascendencia como una sola red, podemos estimar características generales de los antepasados comunes en el árbol genealógico humano, como su edad e incluso potencialmente su ubicación. Nuestro método se podrá escalar potencialmente a millones de genomas”, asegura Wong.

La historia que generó toda nuestra variación genética

Dado que las regiones genómicas individuales solamente se heredan de un progenitor, la ascendencia de cada punto del genoma puede considerarse como un árbol. El conjunto de árboles, conocido como ‘secuencia arbórea’ o ‘gráfico de recombinación ancestral’, enlaza las regiones genéticas a través del tiempo con los ancestros en los que apareció por primera vez la variación genética.

En total, se usaron ocho bases de datos diferentes que incluyeron un total de 3 609 secuencias genómicas individuales de 215 poblaciones. Los genomas antiguos incluían muestras halladas en todo el mundo, con edades comprendidas entre 1 000 y más de 100 000 años. Los algoritmos predijeron dónde debían estar presentes los ancestros comunes en los árboles evolutivos para explicar los patrones de variación genética. La red resultante contenía casi 27 millones de ancestros.

Anthony Wilder Wohns, que llevó a cabo la investigación en la Universidad de Oxford y que ahora es investigador postdoctoral en el Instituto Broad del MIT y Harvard (Estados Unidos), explica que: “Aunque en esta genealogía se incluye una enorme cantidad de detalles, observar la edad media y la ubicación de los antepasados proporciona una gran visión de las características generales de la historia humana. A veces, podemos incluso mostrar todos estos datos para revelar patrones importantes”.

Tras añadir los datos de localización de estos genomas de muestra, los autores utilizaron la red para estimar dónde habían vivido los ancestros comunes. Los resultados recapitularon con éxito acontecimientos clave de la historia evolutiva humana, incluida la migración fuera de África.

“Hace tiempo que se sabe que hubo una dispersión fuera de este continente, quizá hace unos 100 000 años. Las señales de este acontecimiento se encuentran en partes del genoma como el mitocondrial, el cromosoma. Y varios otros genes. Sin embargo, nuestra genealogía muestra, por primera vez, que la señal de este acontecimiento está claramente presente en todo el genoma”, señala Wong.

Los investigadores observaron señales de linajes ancestrales muy profundos en África, el evento fuera de África, y la introgresión o incorporación arcaica de genes en Oceanía.

Las mutaciones que nos dan las pistas

Este método también tiene en cuenta los datos que faltan y los erróneos, y usa genomas antiguos fragmentados para ayudar a identificar el momento de la aparición de los alelos.
“Estos son variantes genéticas. Aparecen por mutación en algún momento, y si se establecen a partir de ese instante, esa posición genómica será variable en la población. Unos cromosomas tendrán un alelo, otros el otro. Podemos inferir la edad de esos alelos usando genomas modernos, pero es un problema difícil y lo hacemos con poca resolución”, revela Andres.

Lo que han hecho en este estudio es usar genomas antiguos de baja calidad para ayudar a determinar su edad. Para cada alelo se han preguntado cuándo lo ven por primera vez. Si, por ejemplo, se observa en un genoma de hace 5 000 años, sabrán con certeza que esa mutación tiene más de esa edad.

“Esto ayuda a mejorar los modelos que nos permiten inferir la historia demográfica humana. Pero, además, si ese alelo tiene efectos importantes —por ejemplo, si nos permite digerir la lactosa, o si aumenta el riesgo de una enfermedad—, mejorar la inferencia de la edad del alelo nos ayuda a entender la historia de ese fenotipo o de esa enfermedad”, continúa la investigadora del University College.

Gil McVean, otro de los coautores de la Universidad de Oxford, recalca: “Los conjuntos de datos genómicos que utilizamos se han construido a partir de muchas fuentes diferentes y utilizando distintos métodos. Inevitablemente, se producen ciertos tipos de error. Nuestro enfoque ayuda a identificarlos. Estimamos que la tasa es pequeña, menos del 0,5 % de los lugares de variantes en el genoma, pero su eliminación crea una imagen más precisa y completa de la variación genómica humana”.

Aunque el estudio se centra en los seres humanos, el método es válido para la mayoría de los seres vivos.

Limitaciones del estudio

Wilder Wohns, por su parte, explica que una de las principales limitaciones de este trabajo es que utilizan un método muy simple para estimar la ubicación de nuestros antepasados.
“Se podría trabajar mucho más en este campo. Además, nuestras estimaciones de la ubicación de los ancestros están limitadas en última instancia por las de las secuencias genómicas. Por ejemplo, la precisión de nuestra reconstrucción de las migraciones de los pueblos indígenas a las Américas se ve dificultada por la relativa escasez de muestras del noreste de Siberia y el noroeste de Norteamérica”, añade.
Además, si se produjeran grandes migraciones históricas que no dejaran descendientes locales, la precisión de dichas estimaciones de la ubicación de los ancestros se vería disminuida.
Por último, el método tiene en cuenta los errores de los conjuntos de datos genéticos utilizados, pero no lo hace a la perfección. Esto también puede afectar a las estimaciones de la edad y la ubicación de nuestros antepasados.

“Desde mi punto de vista, una de las mayores limitaciones de todo estudio que utiliza las grandes bases de datos de genomas existentes —incluido este— es que no tenemos una representación adecuada de todas las poblaciones humanas. Las bases de datos están sesgadas hacia poblaciones muy estudiadas. Por ejemplo, las europeas. Pero esto ocurre, no solo en esta investigación, sino en la mayoría del trabajo genómico actual, y se solucionará solo secuenciando más genomas de más poblaciones mundiales”, concluye Andres.

SINC

Referencia:
Wilder Wohns A. et al. «A unified genealogy of modern and ancient genomes».Science

Noticias nuevas y viejas sobre la Campaña de Vacunación Antipoliomielítica en Cuba

Entonces recordó que este martes 27 ya habían terminado la labor en la zona y se sintió tranquilo. No les quedaba ni un solo niño por vacunar contra la poliomielitis.
La prensa cubana y extranjera de este mes ha anunciado detalles sobre la 61 Campaña Nacional de Vacunación Antipoliomielítica oral que se desarrolla en Cuba. Se destaca el hecho histórico que este país fue el primero en las Américas que eliminó esta enfermedad con la campaña llevada a cabo en 1962. También se señalan registros epidemiológicos sobre la enfermedad en Cuba desde el siglo XIX, incluyendo las cinco grandes epidemias. Así que existen muchas cosas que se pueden recordar y contar sobre las inmunizaciones llevadas a cabo por primera vez y en los años siguientes en todo el territorio nacional.
La primera campaña de 1962 tuvo como escenarios a las ciudades y las zonas montañosas. Se aplicaron simultáneamente cinco millones de dosis de la vacuna oral Sabin (en caramelo y suspensión) en la primera campaña, que abarcó el 87.5 % de la población infantil desde 1 mes hasta 14 años de edad, lo que constituyó el 109.4 % de la cobertura planificada. A partir de ese año no se registraron muertes por poliomielitis (hubo diez casos no letales entre 1963 y 1989) y en 1994 la OMS-OPS certificó la eliminación de la poliomielitis en Cuba. Aquello pudo calificarse como una proeza en cuanto a la movilización de miles de personas para hacer realidad aquel sueño.
Por lo tanto, no resulta extraño que se encontrara anexo al informe final sobre la vacunación de la población de Baracoa, el municipio más oriental y montañoso, un relato de un equipo móvil de vacunación en una región de las Cuchillas del Toa, que hoy forma parte del Parque Alejandro de Humboldt, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
La mencionada crónica tiene fecha del 27 de marzo de 1962 y refleja este episodio de la manera siguiente:
Eran dos caminantes desde hacía seis horas. El frío de la madrugada había desaparecido pronto; primero a causa del esfuerzo que realizaban los cuerpos mientras caminaban y, luego, debido al sol, que empezó tibio, pero al poco rato, estableció una presencia molesta. Ahora sus ropas se pegaban a los cuerpos que sudaban y las piernas se sentían débiles para seguir con constancia el trillo que subía y bajaba.
-¿Qué crees de este sacrificio?,- preguntó el hombre de baja estatura.
-Que lo volveremos a repetir, – contestó su compañero, un hombre espigado, que hizo a su vez una pregunta.
-¿Te sientes cansado?
-Un poco. Hacía tiempo que no caminaba tanto… desde que subimos al Turquino, cuando hice el curso para maestro en San Lorenzo.
-Es dura la caminata, dicen.
-Esta no es nada para aquella. ¿Y tú, cómo te sientes?
-Bien. Pensando en que ya casi terminamos nuestra labor.
-Faltan dos casas, las de Guenén y Hermenegildo, – observó el hombre de baja estatura.
El hombre espigado no contestó y durante un gran rato ambos guardaron silencio.
Bajaban ahora una cuesta angosta y escalonada. El hombre espigado iba detrás y observó que su compañero caminaba en forma desenvuelta. Pensó que era una suerte ir en compañía de alguien que estaba acostumbrado a caminos semejantes.
Al principio, cuando los dejó el transporte a mitad de la cuesta irregular de la carretera en construcción porque la neblina espesa impedía la visibilidad, pensó que no tendrían que andar mucho ya que la distancia sería corta.
Envueltos en la neblina fría, veían el paisaje tocado por impresionantes tintes. Las montañas, cercanas y distantes, ya solitarias o formando grupos, surgían a través de la claridad tenue y la neblina, con sus tintes negruzcos y las formas gigantescas. En los abismos y los valles, a ambos lados de la carretera, la niebla se cuajaba y parecía un lago tranquilo y fascinante. ¡Nunca se olvidan esas imágenes que se levantan como farallones frente a la sensibilidad humana!
-Allá abajo se ve una casa,- exclamó el hombre de baja estatura, señalando con el brazo.
-No la veo,- respondió el otro.
-Deja que te acerques. Es a la derecha de aquel platanal. ¿No ves ahora el entablado de palmas?
-Sí, ya veo. Ojalá tuvieran un caballo en esa casa. Uno de los dos iría hasta la casa de Hermenegildo, y así terminaríamos pronto. Pero no tienen, parece. Nos lo dijo la muchacha taciturna que expurgaba el arroz en la otra casa.
-¡Qué linda la niña que estaba con ella!
-¡Qué rubita! Con seis años y pelaba malangas en el suelo.
-Era hermana de la otra.
Mientras tanto habían tomado un trillo lateral al camino y se hallaban en un llano cerca de la casa.
Una mujer pequeña y sencilla, de rostro consumido y descalza, los recibió en la cocina. Era de carácter agradable y conversadora.
Los dos hombres se sentaron en un banco largo de madera, y tomaron agua.
Los muchachos eran cuatro y tomaron sus nombres y edades.
El mayor gagueaba y parecía que le daba pena. Los hombres seguían aún sofocados.
-Estamos muertos de cansancio, señora. ¿Cómo es que Uds. se han metido aquí?,- dijo el hombre espigado.
-Figúrese, yo no vivía aquí antes. Yo era de cerca del pueblo. Pero un día a mi marido le inquietó la idea de hacer una finca de café aunque empleara siete años. Así lo dijo y fíjese, ya tenemos los siete años y es verdad que la finca está hecha. Ah, miren, todos aquellos sacos están llenos de café.
Los hombres se pusieron de pie y miraron hacia donde señalaba la mujer.
Una vez terminada su misión los hombres se despidieron de la mujer, seguidos de un niño con pantalones cortos y sin zapatos que la señora decidió que los guiara en el camino. A pocos pasos atravesaron un arrollo sobre piedras.
El niño avanzó delante. Tenía un andar ligero y saltarín. El hombre alto empezó a bromear con él. Que si se cansaba. Que si era lejos, que si iba a la escuela, que si no faltaba a clases.
En aquella parte el camino seguía paralelo al río. Este se encajonaba en un cauce de paredes altas y rocosas, principalmente en la orilla opuesta al camino. El niño comentó que las aguas eran muy frías. Luego llegaron a un gran salto. El agua caía estruendosamente y por eso le decían “el trueno”, según les manifestó el niño.
Después de un largo trecho, empezaron a subir. De nuevo era un trillo estrecho. Pero esta vez estaba sombreado por árboles diversos. La ascensión, no obstante, se hacía difícil. Los cuerpos se sentían agotados. Fue necesario sentarse algunas veces y coger impulso de nuevo. Así llegaron a la última casa del recorrido.
Los dos hombres entraron en conversación con el campesino, que era flaco y estirado. Tres mujeres observaban desde la cocina sin paredes. Los niños permanecían sentados en el suelo y encaramados en una escalera.
El campesino usaba un hablar franco. Habló de cuando el hambre se pegó al estómago de su familia, allá en el barrio donde vivían. Fue entonces que decidió emigrar a estos parajes lejanos, donde al menos pronto pudo resolver el hambre de la familia.
Al poco rato los hombres y el niño que los acompañaba, comieron un plato de malanga y tres trozos de carne grasa de cerdo, que una mujer frió. Los cuerpos se reanimaron y desapareció la huella invisible del camino.
Decidieron regresar a Manajú en compañía de Hermenegildo, quien explicó que este viaje de retorno no sería por el camino por el cual llegaron hasta allí. Los hombres se despidieron del niño guía y ellos siguieron al campesino que marchaba con paso apurado. Pronto dejaron la estancia cultivada y se introdujeron en el monte espeso.
El campesino se abría paso con su machete y así la marcha se hacía aprisa. Ellos sabían que al frente se encontraba el punto inicial de regreso.
El hombre espigado se dijo para sus adentros: ¿Y si nos perdemos y no salimos a nuestro punto? Habremos perdido un gran tiempo.
Entonces recordó que este martes 27 ya habían terminado la labor en la zona y se sintió tranquilo. No les quedaba ni un solo niño por vacunar contra la poliomielitis.
Autor: Wilkie Delgado Correa
Doctor en Ciencias Médicas. Doctor Honoris Causa. Profesor Titular y Consultante. Profesor Emérito de la Universidad de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba.
Junio/2022

La Universidad de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba y su efeméride fundacional

Fundada como Escuela de Medicina la Universidad ha graduado 52 961 profesionales para Cuba y el mundo

Mientras en La Habana se celebraban las sesiones de la edición 13 del Congreso Internacional Universidad 2022, del 7 al 11 de febrero, dedicado a la temática Universidad e innovación por un Desarrollo Sostenible inclusivo, en Santiago de Cuba ocurrían las actividades conmemorativas que tenían como efeméride central el 10 de febrero de 1962, fecha del inicio por primera vez de la docencia médica universitaria fuera de la capital de país.

En el acto central se recalcaron ideas y hechos pertinentes en ocasión del 60 aniversario de la institución, tales como los siguientes:

Estaba presente una pequeña representación de quienes un día llegaron como estudiantes a las aulas para cumplir con el mensaje del Che a las universidades, a nombre del gobierno revolucionario, en que expresaba que el pueblo estaba a las puertas de la universidad, y la universidad debía ser flexible y pintarse de negro, de mulato, no solo entre los alumnos, sino también entre los profesores, que se pintara de obrero, de campesino, que se pintara de pueblo, porque la universidad no es patrimonio de nadie y pertenece al pueblo de Cuba. En fin, la universidad abría sus puertas o se quedaba sin puertas.

Ante esta disyuntiva, y mediante la Ley de la Reforma de la Enseñanza Superior, proclamada el 10 de enero de 1962, la universidad abrió sus puertas. Y aquel proceso inicial tuvo su continuidad en los años siguientes para hacer realidad el pensamiento visionario de José Martí, expresado en 1892, de que Cuba sería la futura Universidad de América.
Fue así que dicha ley estableció la creación de la Escuela de Medicina de Santiago en febrero de 1962 y de la Escuela de Estomatología en agosto de 1963, creándose con ello la Facultad de Ciencias Médicas adscripta a la Universidad de Oriente. En 1967 se produjo la primera graduación de Ciencias Médicas en Santiago de Cuba, con 51 egresados, 32 de Medicina y 19 de Estomatología. Y luego ocurrió el proceso de conversión de la institución independiente: La Universidad de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba, teniendo como origen el embrión ya señalado.
Se recalcó que en lo individual cada cual podría recordar sus inicios hasta el día de hoy. Así debía ocurrir con cada oleada de egresados, que ya suman miles, tanto cubanos como extranjeros. Los datos son ilustrativos: 52 961 profesionales entre médicos, estomatólogos, enfermeros y tecnólogos de la salud, de los cuales 4 399 son extranjeros procedentes de 71 países de América Latina y el Caribe, Asia y África.

Los primeros graduados ahora estaban cargados de años y de sueños realizados y de otros muchos que quisieran ver convertidos en realidad en el futuro. Muchas cosas pasaron antes de que se alcanzara este momento de jubileo. Se sabía también que por causas naturales de la fisiología humana o por las circunstancias de la vida y la lucha muchos hoy no estaban presentes.

Se afirmó que afortunados han sido quienes han podido ver este hermoso día de celebración. Quienes han permanecido del lado del honor, cuando miran hacia atrás y cuando contemplan esta obra grandiosa de la Universidad de antes y de ahora, saben que ha significado muchos años de trabajo, de sacrificio y de esperanza. Regocija ver que en algún lugar de la universidad y de otros centros laborales, ya sean facultades, hospitales, policlínicos o clínicas; en fin, en un lugar de Cuba o de otros países, han quedado las huellas, alguna señal indeleble que cada uno de los profesionales dejó en este enorme y bello edificio que un día ya lejano, hace 60 años, empezaron a construir bajo la guía de sus profesores y la ayuda de dirigentes y otros trabajadores. Y esa es la verdadera recompensa.

Así que hoy los egresados pueden patentizar que han sido leales a las tres madres superiores: la patria, la revolución y la universidad. Y, en consecuencia, no hay mayor mérito que éste.

Autor: Wilkie Delgado Correa

*Doctor en Ciencias Médicas y Doctor Honoris Causa. Profesor Titular y Consultante. Profesor de Mérito de la Universidad de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba.

Anders Celsius, conozca algo curioso sobre su escala de temperatura

Hace 320 años, el 27 de noviembre de 1701, en Upsala, Suecia, nacía el físico y astrónomo Anders Celsius. Es conocido principalmente por construir el termómetro con la escala de temperatura que ahora conocemos como “Celsius”, en la que se toma al punto de congelación y de ebullición del agua como referencias y se divide el intervalo en 100 partes iguales. Sigue leyendo «Anders Celsius, conozca algo curioso sobre su escala de temperatura»

De los oráculos a las predicciones pandémicas: una historia de nuestra obsesión por el futuro

De los oráculos a las predicciones pandémicas: una historia de nuestra obsesión por el futuroLa crisis de la covid ha desatado la incertidumbre y estimulado una intensa actividad predictiva en medios y redes sobre qué nos espera. De ahí la oportunidad de la exposición La Gran Imaginación: Historias del Futuro, que en la Fundación Telefónica repasa los futuros pasados, los modos de anticipar el porvenir y los escenarios posibles para los próximos años. Sigue leyendo «De los oráculos a las predicciones pandémicas: una historia de nuestra obsesión por el futuro»

Las madres orangután enseñan de manera activa a sus crías a desenvolverse en la vida

Hasta ahora se creía que estos grandes simios aprendían siguiendo el modelo pasivo de sus progenitores. Sin embargo, un nuevo estudio muestra por primera vez que las madres orangután, participan activamente en el aprendizaje de las habilidades de sus crías. Sigue leyendo «Las madres orangután enseñan de manera activa a sus crías a desenvolverse en la vida»

Que nadie piense que, siguiendo una dieta poco saludable, por tomar un superalimento va a mejorar su salud

¿Qué son los superalimentos? ¿Es un concepto legal o científico? ¿Sus propiedades de sustentan en estudios científicos? ¿Hay que introducirlos en la dieta? ¿Pesa más lo exótico que lo nutricional a la hora de decidir si se consumen o no? Sigue leyendo «Que nadie piense que, siguiendo una dieta poco saludable, por tomar un superalimento va a mejorar su salud»

Estos son los cambios en nuestro estilo de vida que sí importan frente a la crisis climática

Adoptar nuevos hábitos para combatir el cambio climático supone modificar cómo nos desplazamos, consumimos y nos alimentamos. No es fácil: en general, los europeos son reticentes. Además, las acciones individuales deben ir acompañadas de políticas climáticas para limitar el aumento de la temperatura media global a 1,5 ºC. Sigue leyendo «Estos son los cambios en nuestro estilo de vida que sí importan frente a la crisis climática»

La mitad de las aves rapaces que se reproducen en el Norte de África están en peligro de extinción

La mitad de las aves rapaces que se reproducen en el Norte de África están en peligro de extinciónLa Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza ha evaluado el estado de conservación de 36 especies de aves rapaces que se reproducen en el norte del continente africano. Sigue leyendo «La mitad de las aves rapaces que se reproducen en el Norte de África están en peligro de extinción»

El oído interno de los primates del Mioceno esconde claves de la evolución humana

El oído interno de los primates del Mioceno esconde claves de la evolución humanaUn estudio liderado por el Instituto Catalán de Paleontología Miguel Crusafont analiza la relación de parentesco entre dos grandes primates antropomorfos extintos a partir de la forma de los canales semicirculares de su oído interno. Esta estructura revela datos que reconstruyen el parentesco entre las especies de primates fósiles y confirma que ambos homínidos son distintos entre sí y muy similares a los chimpancés y a los bonobos actuales. Sigue leyendo «El oído interno de los primates del Mioceno esconde claves de la evolución humana»