En nuestra comunidad primitiva el médico o behique ejercÃa las curaciones que sus conocimientos le permitÃan sin que existiera división alguna en sus funciones, más aún ejercÃa las actividades de sacerdote y de consejero del cacique como verdadero sabio de la comunidad.
Al producirse la conquista hispana nos va a llegar la práctica médica europea en la que ya existÃa una división del ejercicio médico en dos grandes ramas: la medicina, que se encargaba del tratamiento de las afecciones internas, de ahà su nombre actual de medicina interna, y la cirugÃa, que se ocupaba de las afecciones externas, por lo que durante mucho tiempo se le llamó también patologÃa externa. Sigue leyendo «Inicios de la angiologÃa en Cuba»